Este conjunto de pequeñas islas está bañado por el mar Caribe y es un área protegida que también recibe el nombre de San Blas. Se encuentra a unas dos horas de trayecto por carretera desde ciudad de Panamá, la capital del país. El lugar destaca por sus aguas transparentes de color turquesa, su arena blanca y la riqueza natural que cubre las islas.