Silencio, calma y brisa es lo que se siente al llegar a la Laguna Garzón y contemplar el paisaje panorámico de la reserva natural. Sobre el horizonte se divisa la silueta de deportistas que practican kitesurf, windsurf o stand up paddle sobre el lago. Sin embargo, lo que más destaca es su original puente, auténtica fusión entre arquitectura y belleza natural, con su forma de anillo sostenido por columnas y una funcionalidad que permite el libre flujo del agua, el uso de embarcaciones y el cruce peatonal para disfrutar del paisaje.