Esta inmensa pagoda formada por estupas doradas se remonta al siglo XII y en ella destaca su monumental campana principal. Se encuentra en la ciudad de Bagan, en Myanmar, la antigua Birmania, un destino famoso por sus numerosos templos, grandes joyas que están envueltas por una increíble naturaleza. Es un lugar excepcional que guarda uno de los grandes tesoros arqueológicos del mundo.
Este lugar espectacular cuenta con más de 2.000 pagodas y templos budistas calificados como auténticas joyas del patrimonio histórico y cultural birmano. Estas construcciones religiosas fueron levantadas entre los siglos XI al XIII, uno de los períodos de mayor esplendor de toda la región.