Ponemos rumbo a Castilla-La Mancha, una comunidad autónoma situada en el centro de España con cientos de rincones para descubrir, poseedora de un rico patrimonio histórico y cultural y de una gastronomía capaz de seducir a los paladares más exigentes.
Al sur de este interesante territorio se encuentra la provincia de Albacete. En ella, concretamente en el Cerro de San Cristóbal, vamos a encontrar nuestro destino: Alcaraz, nombre que deriva de Al-Karrash, denominación con la que era conocida la población en época musulmana.
La localidad nos enamora a primera vista cuando descubrimos su impresionante Plaza Mayor, una joya renacentista repleta de puntos de interés, un espacio de arquitectura privilegiada, lugar emblemático de la población que está declarado Monumento Histórico-Artístico.
Despuntando en altura en este bello conjunto que conforma la plaza se encuentran dos torres: la de la iglesia de la Trinidad y la del Tardón, ambas se remontan al siglo XVI y son obra de Andrés de Vandelvira, reconocido arquitecto nacido en Alcaraz, figura excepcional por la que sienten gran orgullo en la población y cuyas huellas artísticas están repartidas por todo el territorio.
La Plaza Mayor es el auténtico corazón de Alcaraz, un lugar que invita al paseo y en el que la imaginación nos transporta a tiempos pasados. En este bello espacio rectangular también llaman la atención sus lonjas: la del Ahorí, actual sede consistorial, la del Corregidor y la de la Regatería.
Recorrer la localidad es un placer, pero también los alrededores de esta población de la Sierra de Alcaraz ofrecen una atractiva excursión. Se trata de un territorio de gran belleza y valor ecológico, un espacio natural repleto de contrastes y monte virgen que nos anima a una estupenda ruta senderista por espacios naturales que en su día también transitaron algunos célebres bandoleros y salteadores de caminos del siglo XIX.
Sin embargo, antes de lanzarnos a caminar por la sierra, lo más recomendable es recuperar energía con algunos de los ricos platos tradicionales de Alcaraz. La gastronomía castellano-manchega es contundente y se precia de conservar su esencia más tradicional. Son platos que nunca decepcionan, elaborados con ingredientes sencillos y auténticos que consiguen resultados espectaculares.
--------
Autor de las imágenes: Martín Posadas
Escribe tu comentario