Albi, la ciudad natal del reconocido pintor Toulouse-Lautrec, se encuentra en pleno corazón de Occitania y es una visita imprescindible si nos encontramos en esta región de Francia. La Catedral de Santa Cecilia, el Puente Viejo y su centro histórico medieval son algunos de sus lugares de interés. Además, toda la ciudad posee una característica que le confiere un punto diferente: el ladrillo de color rojizo con el que están construidos sus edificios.