Las líneas de Nasca, uno de los destinos arqueológicos más fascinantes de Perú y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1994, se han convertido nuevamente en el centro de atención global gracias a un reciente estudio que ha descubierto 303 nuevas figuras en el desierto peruano. Este hallazgo, facilitado por técnicas de inteligencia artificial, abre nuevas oportunidades para el turismo, sumergiendo a los visitantes en el misterio de los geoglifos y en una experiencia única de conexión con el pasado precolombino.
El estudio, dirigido por la Universidad de Yamagata en colaboración con el Ministerio de Cultura de Perú, ha utilizado algoritmos avanzados para identificar figuras hasta ahora desconocidas en el vasto paisaje desértico de Nasca. Las nuevas imágenes descubiertas representan figuras humanas, animales y formas geométricas, aportando nuevos indicios sobre las prácticas culturales de las civilizaciones antiguas que habitaron esta región.
Las líneas de Nasca, uno de los destinos arqueológicos más fascinantes de Perú y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1994, se han convertido nuevamente en el centro de atención global gracias a un reciente estudio que ha descubierto 303 nuevas figuras en el desierto peruano. Este hallazgo, facilitado por técnicas de inteligencia artificial, abre nuevas oportunidades para el turismo, sumergiendo a los visitantes en el misterio de los geoglifos y en una experiencia única de conexión con el pasado precolombino.
El estudio, dirigido por la Universidad de Yamagata en colaboración con el Ministerio de Cultura de Perú, ha utilizado algoritmos avanzados para identificar figuras hasta ahora desconocidas en el vasto paisaje desértico de Nasca. Las nuevas imágenes descubiertas representan figuras humanas, animales y formas geométricas, aportando nuevos indicios sobre las prácticas culturales de las civilizaciones antiguas que habitaron esta región.
Un destino arqueológico sin precedentes:
Las líneas y geoglifos de Nasca y Palpa, situadas en la región de Ica, a 445 km al sur de Lima, son un conjunto de más de 2.000 figuras de gran escala que incluyen líneas rectas, trapezoides, espirales y dibujos de animales, plantas y figuras antropomorfas. Estas enigmáticas figuras, visibles en toda su magnitud solo desde el aire, son un tesoro arqueológico que atrae cada año a miles de turistas de todas partes del mundo. El área donde se encuentran los geoglifos abarca unos 500 kilómetros cuadrados, y se cree que los dibujos fueron realizados entre el 500 a.C. y el 500 d.C.
Atractivos turísticos y accesibilidad
Existen varias opciones para explorar este destino misterioso y emocionante:
Vuelo panorámico: para apreciar las figuras en todo su esplendor lo ideal es sobrevolar la zona en avionetas. Varias compañías locales ofrecen vuelos de 30 a 60 minutos, proporcionando una perspectiva completa y detallada de los geoglifos. Estos vuelos se pueden tomar con previa reserva desde dos puntos, Nasca y Pisco.
Museo Didáctico Antonini: este museo exhibe artefactos arqueológicos encontrados principalmente en Cahuachi, un antiguo centro ceremonial de la cultura Nasca. A través de las exhibiciones, los visitantes pueden obtener mayor contexto sobre la civilización que realizó los geoglifos, una experiencia ideal para complementar la visita a las líneas de Nasca.
Centro ceremonial de Cahuachi: constituye el centro ceremonial de barro más grande del mundo, en la que se alza un conjunto de pirámides truncas, signo del esplendor económico y político de la cultura Nasca. Las excavaciones en la metrópoli revelan bienes de cerámica tradicional y diferentes objetos ceremoniales, que evidencian la tradición religiosa y la estructura de la sociedad Nasca.
Acueductos de Cantalloc: esta obra de ingeniería hidráulica, única en América, fue realizada por la civilización Nasca con piedra laja y troncos de huarango para captar aguas subterráneas. Hoy continúa funcionando y resaltan los 17 "Puquios", ductos en espiral que descienden al subsuelo y permiten obtener agua de mejor calidad.
En 2023, 58.372 personas sobrevolaron las líneas de Nasca, atraídas tanto por el enigma de las figuras como por el interés arqueológico de la zona. Gracias a los vuelos directos entre Madrid y Lima, que permiten una conexión rápida y cómoda, los viajeros españoles pueden incluir las líneas de Nasca en su itinerario peruano.
Desde Paracas, otro punto turístico en la región de Ica, el destino se encuentra a 3 horas en coche, lo que hace de Nasca una parada accesible en una aventura por el Perú.
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