Nos acercamos hasta un pequeño paraíso mediterráneo. Nuestro destino es una isla, un pequeño territorio bañado por aguas cristalinas que acaban descansando en playas de postal. Estamos en Corfú, la principal de las Islas Jónicas, un lugar lleno de encanto y con una intensa historia. En este punto de Grecia, de pueblos pintorescos y cielos luminosos, las leyendas mitológicas nos transportan hasta escenarios mágicos.
Corfú, Kerkyra en griego, recibe su nombre de una ninfa de la que Zeus se enamoró. La ninfa se llamaba Kércira, hija de Esopo. La bella deidad fue raptada por el poderoso dios y llevada hasta esta hermosa isla que combina como en un sueño el azul intenso del mar con los tonos verdes de su frondosa vegetación.
La capital de la isla es un lugar repleto de atractivos. Su parte antigua posee un importante patrimonio histórico, cultural y artístico con el que se ha ganado la declaración de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Callejuelas empedradas, pequeñas iglesias, encantadoras casas… Es un placer pasear por este punto de Grecia. Y eso es precisamente lo que nos disponemos a hacer, con el fin de recorrer algunos de los lugares más destacados de la isla.
Templo de Artemisa
Es un magnífico templo de estilo dórico que se remonta al siglo VII a.C. Está dedicado a Artemisa, diosa de la naturaleza y la caza, y construido con piedra caliza. Se encuentra en un magnífico estado de conservación.
Fortaleza veneciana
Las huellas del paso de los venecianos por la isla tienen su máximo exponente en esta antigua fortaleza del siglo XVI, considerada una de las más importantes del Mediterráneo. Se encuentra sobre un gran islote al que se accede a través de un puente. Cuenta con un interesante museo de objetos bizantinos y una buena colección de monumentos y edificios históricos, como la iglesia de San Jorge. Las vistas de la ciudad de Corfú desde esta fortaleza son impresionantes.
Islote de Pontikonisi
Conocida popularmente como ‘la isla ratón’, probablemente por sus pequeñas dimensiones, en el islote de Pontikonisi se encuentra un monasterio del siglo XVII y la iglesia de Pontikonisi, una construcción rodeada completamente por altos cipreses. El pequeño trozo de tierra está a muy poca distancia de Corfú y se puede llegar hasta él en ferri.
Península de Kanoni
Es una pequeña península a escasos minutos del centro histórico de la ciudad de Corfú y otra de las imágenes emblemáticas de la isla. Está unida a Corfú por un largo dique y en ella se encuentra una iglesia de paredes blancas. El nombre Kanoni deriva de un cañón abandonado en este lugar por las tropas napoleónicas.
Palacio Aquileón
Esta bella construcción del siglo XIX, levantada en honor al héroe Aquiles, es un palacio que hizo construir la emperatriz Isabel de Austria, gran amante de la cultura de la Grecia antigua. Conocido como el palacio de Sissí Emperatriz, se encuentra en Gastouri, una pequeña población a unos diez kilómetros de la ciudad de Corfú. Está situado sobre una colina a más de 140 metros de altura, ofreciendo unas vistas fascinantes del mar y del entorno. Las zonas exteriores del palacio y sus jardines están adornados con bellas esculturas y obras de arte.
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