​Parques nacionales: espectaculares escenarios para fundirse con la naturaleza

El mundo está repleto de espacios y territorios especialmente valiosos por su riqueza natural incomparable. Son lugares alfombrados de frondosos bosques, lagos, formaciones geológicas impresionantes y una fauna y flora únicas. Son espacios protegidos que presentan paisajes fascinantes y miles de posibilidades para fundirnos con la naturaleza mediante la realización de actividades al aire libre. 

Nos disponemos a realizar un recorrido por algunos de los parques nacionales más impresionantes del planeta. Iniciamos camino en los Picos de Europa, uno de los macizos montañosos más espectaculares de la península ibérica y el primer parque nacional que se creó en España. 

Picos de Europa - España 

Los Picos de Europa, catalogados por la UNESCO como Reserva Mundial de la Biosfera, ocupan un área que comparten las comunidades de Asturias, Cantabria y Castilla y León. La zona posee una belleza indiscutible, cualidad que la ha convertido en un valorado punto de atracción turística. En este sentido, posee una infraestructura que presenta áreas recreativas, puntos para visitantes, actividades de senderismo… 

Uno de los lugares más conocidos y populares de los Picos de Europa son los Lagos de Covadonga, uno de los espacios más visitados de este paraíso natural. Son dos pequeños lagos de origen glaciar, llamados Enol y Ercina, que se encuentran rodeados por algunos de los montes más altos del parque. Están situados a más de 1.000 metros sobre el nivel del mar. 

Parque Nacional Aoraki – Nueva Zelanda 

También conocido como Parque Nacional Monte Cook, porque aquí se encuentra el famoso Monte Cook, la montaña más alta de Nueva Zelanda, en la que el mítico alpinista neozelandés Sir Edmund Hillary se preparó para finalmente conseguir conquistar el Everest junto al sherpa Tenzing Norgay, a quien también se ha de reconocer un enorme mérito en esta proeza. 

Este parque es Reserva Internacional de Cielos Oscuros, aquellos cielos a los que no llega la contaminación lumínica. Desde este impactante lugar se pueden observar desde la Aurora Australis hasta las Nubes de Magallanes o la Estrella del Sur. 

El lago Pukaki, otra de las grandes atracciones naturales de este punto del país. Posee hermosas aguas color turquesa y es un lugar mágico que invita a la contemplación y que sirvió de escenario para algunos momentos del conocido film ‘El señor de los anillos’, del director neozelandés Peter Jackson. 

Parque Nacional Snowdonia – Gales 

En la costa oeste de Gran Bretaña, concretamente al norte de Gales se encuentra este territorio espectacular, el primer territorio en ser designado Parque Nacional de los tres que posee Gales. Es un extenso espacio que cuenta con una de las montañas más altas de Inglaterra -Snowdon, con más de 1.000 metros- y el lago Bala, el lago natural más grande de este punto del planeta. 

Además de las zonas de increíble naturaleza, si recorremos este territorio vamos a disfrutar de pequeños y pintorescos pueblos, castillos, abadías, cascadas, playas y un sinfín de opciones para practicar deporte y paseos. 

Parque Nacional de Yosemite – Estados Unidos 

Situado en la costa oeste de Estados Unidos, en el estado de California, este territorio protegido fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en la década de los ochenta del siglo pasado. Ocupa una extensión de 3.000 kilómetros cuadrados y recibe cerca de 4 millones de visitantes todos los años. Es uno de los parques nacionales más veteranos y apreciados de Norteamérica, cuestión que no nos extraña si tenemos en cuenta su belleza y la riqueza natural que alberga. 

Yosemite es un paraíso de espectaculares secuoyas gigantes, montañas de granito, cañones, cascadas y acantilados que impactan. Sus bosques y su gran diversidad de plantas y animales completan esta maravilla. En el parque nos vamos a encontrar, entre otras bellezas, con el Salto Yosemite, la cascada más alta de Norteamérica, un refrescante espectáculo de más de 700 metros de altura. 

Parque Nacional Banff – Canadá 

Fundado en 1885, es el más antiguo de los 41 parques nacionales de Canadá. Banff, en la provincia de Alberta, es uno de esos lugares que emocionan y nos llenan la retina de miles de colores. Lagos, montañas, bosques, glaciares, manantiales de aguas termales, cañones, cascadas, flores, fauna… Banff no se priva de nada y despliega todos sus encantos naturales en sus más de 6.600 kilómetros cuadrados de extensión. 

Se encuentra situado a los pies de las Montañas Rocosas canadienses y hace frontera con otros dos espectaculares parques nacionales del país: Yoho y Jasper. El parque debe su nombre a la localidad de Banff y ésta a la escocesa de Banffshire, lugar de nacimiento de Lord Stevens, uno de los fundadores de la red ferroviaria Canadian Pacific. 

Parque Nacional Torres del Paine – Chile 

Este lugar está declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO y fue elegido como la octava maravilla del mundo en el año 2013. Este espacio protegido, situado en la Patagonia chilena cerca de la frontera con Argentina, recibe su nombre de tres imponentes cumbres que perfilan un paisaje bellísimo: las Torres del Paine, tres picos de granito de paredes verticales de gran de altura que nos saludan rozando el cielo con sus puntiagudas cimas. 

El lago Pehoé es uno de los más fotografiados de este territorio, tanto por su belleza como por la presencia de una pequeña isla en sus aguas. El parque también nos invita a disfrutar de sus glaciares. Uno de los más populares es el glaciar Grey, un lugar que impresiona por su gran pared helada. 

Parque Nacional de Rila – Bulgaria 

A unos 100 kilómetros al sur de Sofía, la capital, nos encontramos con el Parque Nacional de Rila, el más grande del país, un territorio natural impresionante en el que destacan sus altas montañas y una generosa cantidad de lagos. En este espacio nacen algunos de los ríos más importantes de los Balcanes. De hecho, el nombre de Rila significa ‘gran cantidad agua’. 

En este punto de Bulgaria nos encontramos con un auténtico tesoro natural, un fenómeno único en el continente europeo: los Siete Lagos de Rila, un lugar lleno de encanto y formado por un conjunto de lagos glaciares fascinantes salpicados por pequeñas cascadas y arroyos. 

Parque Geológico Nacional Zhangye Danxia – China 

Este territorio singular se extiende a lo largo de unos 500 kilómetros cuadros en la provincia de Gansu. ¿Cómo se ha formado? A fuego lento, como los buenos guisos. Es decir, han sido necesarios cerca de 25 millones de años para que estas formaciones rocosas se crearan a base de diferentes capas de depósitos de areniscas y minerales que le proporcionan su aspecto multicolor. La erosión provocada por los factores climatológicos –lluvia, viento, sol…- hizo el resto. 

Este sólido arcoíris está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no solo por su belleza y por la fascinación que ejerce su contemplación, sino también por su valor científico para entender mejor los movimientos y comportamiento de la Tierra a lo largo de diferentes edades geológicas. 

Parque Nacional de Seoraksan – Corea del Sur 

Es el primero que se creó en el país. La UNESCO designó como Área de Preservación de la Biosfera, aspecto que no nos extraña, porque si de algo puede presumir esta zona del país asiático, situada muy cerca de su vecino del norte, es de un exuberante despliegue de belleza natural con raras especies que encuentran aquí su mejor hogar. 

El parque, muy apreciado entre los coreanos, exhibe una imponente cadena montañosa que abarca un área de casi cuatrocientos kilómetros cuadrados. Sus cumbres nos ofrecen un espectáculo fascinante cuando asoman sobre las nubes. 

Parque Nacional del Teide – España 

Es uno de los lugares más emblemáticos de Tenerife y uno de los monumentos geológicos más espectaculares del mundo. Su paisaje nos hace imaginarnos en otro planeta debido a su aspecto árido y sus caprichosas huellas y formaciones derivadas de su carácter volcánico. Chimeneas, ríos de lava petrificada, cenizas volcánicas… Con estos ingredientes, el espectáculo natural está servido. 

Declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, presenta una rica fauna y flora con ejemplares endémicos y exclusivos de la zona. El tajinaste rojo es una de las especies vegetales más destacadas. 

Aquí todo se desarrolla bajo la atenta mirada del autor de tanta belleza: el volcán Teide, la tercera estructura volcánica más alta del planeta con alrededor de 3.700 metros sobre el nivel del mar.