Nos acercamos a un lugar de Marruecos que nos evoca algunas imágenes de conocidas películas. Títulos tan destacados como Gladiator, Alejandro Magno o la popular serie Juego de tronos han utilizado como escenario el destino al que nos dirigimos. Se encuentra a unos 200 kilómetros al sur de Marrakech y forma parte de la llamada Ruta de las Fortalezas, un itinerario que nos adentra en numerosas poblaciones que destacan por su exotismo y nos acercan a la más genuina cultura bereber.
El lugar que visitamos es un ksar, una población fortificada y protegida por torres de vigilancia a la que se accede a través de grandes puertas. Estas ciudades amuralladas y elaboradas con adobe solían construirse cerca de los oasis.
El ksar Ait Ben Haddou es probablemente uno de los más espectaculares de Marruecos, tanto que se ha ganado la declaración de Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Este lugar fue en su origen una concurrida parada de comerciantes que cruzaban el desierto con sus mercancías. No se tienen datos exactos de la época en la que se construyó esta increíble ciudad, una de las mejor conservadas de todo Marruecos.
Las elevadas torres de Ait Ben Haddou, decoradas con dibujos geométricos, protegen las casas y las numerosas callejuelas laberínticas que se encuentran en el interior del ksar. También preservan su plaza pública, lugar de reunión y paso de los habitantes de la ciudad, el mercado, la mezquita, la escuela y las pequeñas tiendas de artesanía.
En el interior de ksar nos invade una intensa sensación de retorno al pasado. El ambiente es mágico y muy pintoresco. Ya en el exterior nos vemos rodeados por un árido y rojizo desierto que encuentra su toque refrescante en los árboles que rodean a la población, donde las palmeras datileras son las protagonistas. Ait Ben Haddou es, sin duda, parada obligada si nos encontramos de visita en el reino alauí.
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