Las costas de Turquía, desde el Mediterráneo hasta el mar Egeo, con sus aguas azul turquesa, representan uno de los paisajes más bellos del país. La Riviera Turca cautiva con sus playas de ensueño, donde el sol acaricia la arena dorada. Impregnada de un rico legado cultural y gastronómico, cada rincón de este destino cuenta una historia milenaria y, a su vez, conquista los paladares más exigentes con sus exquisitas recetas.