Colonia, la ciudad vibrante y jovial

Colonia es una de las ciudades con más carácter de toda Alemania. Cuenta con una bellísima catedral, la más grande del país y es la ciudad que tiene una mayor cantidad de bares y cafeterías por habitante. También es el lugar en el que nació uno de los productos más conocidos del mundo: el tradicional Agua de Colonia. Su creador fue Giovanni María Farina, un italiano que se trasladó a Colonia a principios del siglo XVIII y allí fundó su fábrica de perfumes, considerada hoy en día la más antigua del mundo. Actualmente sigue estando en el mismo edificio y puede realizarse una visita en la que descubriremos curiosidades muy interesantes en torno a este aromático producto. También tiene su propio museo el Agua de Colonia conocido como “4711”, que surgió a partir del invento de Farina y que se ha hecho popular en todo el mundo.

La creación del perfumista italiano se hizo especialmente famosa porque ayudaba a disimular los malos olores entre las gentes pudientes, circunstancia que acabó dando fama internacional a la ciudad de Colonia, actualmente una urbe joven y divertida en la que siempre encontraremos una buena oportunidad de compartir unas ricas salchichas con chucrut y brindar con una generosa jarra de Kölsch, la especialidad local de cerveza y la bebida oficial de Colonia.

Colonia se encuentra situada en la cuenca del río Rin en el cruce de antiguas rutas comerciales. Es cosmopolita y acoge al visitante desplegando numerosos atractivos históricos y culturales. También festivos, no en vano luce orgullosa su más famosa celebración: el Carnaval. Además, presume de poseer una de las calles más comerciales de Europa, una antigua vía que existe desde época romana y que comenzó su andadura comercial en la Edad Media.

La Catedral de Colonia y el Museo Ludwig

Cita obligada si nos encontramos en Colonia es visitar su barrio histórico. De un tamaño moderado, es una zona llena de encanto de día y de diversión asegurada por las noches.

Allí nos encontramos la catedral, símbolo de Colonia por excelencia, una de las iglesias más grandes del mundo y la atracción turística número uno de Alemania. Esta joya de estilo gótico fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y guarda las reliquias de los Reyes Magos, aunque nos consta que este último dato es puramente simbólico ya que, como todos sabemos, sus Majestades de Oriente siguen en activo repartiendo regalos por todo el mundo en la noche del 5 al 6 de enero.

Muy cerca de la Catedral de Colonia se encuentra el Museo Ludwig, un espacio dedicado al arte moderno y de vanguardia que impacta por su imagen exterior, ya que contrasta significativamente con el paisaje gótico que le proporciona la catedral. El museo acoge obras de arte pop, de arte abstracto, de surrealismo e incluso una amplia colección del gran Pablo Picasso.

Sin dejar el centro, el Ayuntamiento de esta ciudad, el más antiguo de Alemania con cerca de novecientos años a sus espaldas, también merece una visita. Está considerada una de las construcciones más representativas del Renacimiento.

De paseo por parques y puentes

El Rin, el río que atraviesa la ciudad y uno de los más importantes de Europa, bien merece un paseo. La vista desde los puentes que lo atraviesan nos proporciona uno de los mejores espectáculos de Colonia, invitándonos a descubrir modernidad, como en el caso de las conocidas casas grúa, y vetustez casi a partes iguales.

La ciudad también disfruta de una buena cantidad de parques, entre ellos se encuentra el Rheinpark, situado en la ribera derecha del Rin y considerado uno de los más bonitos de Alemania. Posee unas dimensiones considerables, por lo que una opción es recorrerlo en tren turístico, aunque los más andarines estarán en su salsa. No le falta de nada: atracciones, zonas de juegos, espacios para conciertos y hasta un teleférico que nos regala unas magníficas vistas y nos conecta con el zoológico al otro lado del río.

Al rico chocolate

Muy cerca de la catedral se encuentra el Museo del Chocolate, un espacio inaugurado en la década de los noventa del siglo pasado que nos recibe entre aromas dulces que quiebran nuestra resistencia. No luchemos contra la tentación, porque acabaremos cayendo rendidos a ella.

Además de alguna chocolatina de regalo, el museo ofrece al visitante detalles en torno a este producto, como su elaboración, origen, historia… Todas las especialidades están presentes: el blanco, el puro, con frutos secos, praliné, chocolates rellenos…

Día 11 del mes 11 a las 11:11

Esta aparente fijación por el número once tiene su explicación. Responde a la gran atracción festiva de Colonia: el Carnaval, cinco días de celebración en la que no parece importar el intenso frío. Curiosamente, el inicio oficial de esta fiesta es el día 11 del mes 11 (noviembre)  a las 11:11 horas, aunque la celebración se concentra especialmente en el mes de febrero.

El divertido acontecimiento tiene lugar en la ciudad desde hace dos siglos y atrae a miles de personas todos los años. Una de las citas que marca el calendario de esta fiesta es el conocido como Día de las Mujeres, en el que ellas toman el mando absoluto. También es muy divertido el gran y alocado desfile en el que podemos ver disfraces variopintos, grandes cabezudos o esperados lanzamientos de caramelos y pequeños ramilletes de flores.