Procesiones en Valladolid, capital de España

Las procesiones de Semana Santa de Valladolid son diferentes. Representan la mayor celebración de la ciudad. Pero no es únicamente una muestra religiosa, sino también cultural y artística. Fueron en 1980, las primeras procesiones de España en declararse de Interés Turístico Internacional.

Anualmente el Museo Nacional de Escultura, ubicado en el colegio de san Gregorio, presta 42 piezas para los pasos. Las obras son de una enorme relevancia artística, se las considera de las más importantes del mundo en escultura policromada. Algunas de ellas son de autores de la magnitud de Juan de Juni o Gregorio Fernández, 2 de los mayores exponentes del siglo de oro español y que vivieron en Valladolid gran parte de su carrera.

Las cofradías históricas

Es precisamente entre los últimos años del siglo XV y en el siglo XVI cuando se fundan en Valladolid las 5 cofradías penitenciales históticas- Vera Cruz, Angustias, Piedad, Sagrada Pasión y Jesús Nazareno.- Estas 5 cofradías históricas exhiben también en sus pasos obras propias del siglo XVI y XVII. Actualmente hay 20 cofradías en Valladolid y más de 30 pasos de semana Santa.

La más antigua de todas ellas, la Cofradía Penitencial de la Santa Vera Cruz, data de 1498, y su sede es la iglesia que recibe el mismo nombre, un templo de finales del siglo XVI en la calle Platerías.

Procesiones

Entre todas las procesiones destaca la Procesión General de la Sagrada Pasión del Redentor, que tiene lugar el Viernes Santo, en la que participan todas las cofradías juntas. Se inicia a las 19.30 desde la Iglesia de las Angustias, sede de la cofradía del mismo nombre. Se trata de un templo de finales del siglo XVI ubicado frente al célebre Teatro Calderón. La procesión recorre parte del centro histórico de Valladolid, como la plaza de la Libertad, La plaza de la Fuente Dorada, La Plaza Mayor, La plaza de Zorrilla, etc y al terminar se regresa al punto de origen donde la cofradía anfitriona entonará La Salve Popular y se impartirá la bendición.

El Semón de las 7 palabras

También especialmente significativo de la Semana Santa vallisoletana es el Sermón de las 7 palabras. Tiene lugar a las doce del mediodía del mismo Viernes Santo en la Plaza Mayor. Cada año es una personalidad diferente quien pronuncia el sermón, y este año 2017, por primera vez recaerá sobre una mujer, Nuria Calduch Benages, miembro de La Pontificia Comisión Bíblica.

Previo al sermón, el pregonero oficial recorre las calles históricas a caballo, emulando como se hacía antiguamente e insta a la gente a acudir al sermón de las siete palabras. El pregonero recoge, a las 8.30 de la mañana, de manos del Cardenal Arzobispo el pergamino del pregón. Entonces comienza su recorrido a caballo desde el palacio arzobispal por algunos de los símbolos más importantes de la ciudad, como la Plaza de la Trinidad, la Iglesia de San Pablo, El Museo nacional de Escultura, El Teatro Calderón, La Catedral, La iglesia de El salvador, La plaza de Colón, La Academia de Caballerías, etc para finalizar el recorrido en el atrio de Santiago a las 11 de la mañana.

La Semana Santa de Valladolid se caracteriza por su solemnidad y por el intenso silencio y respeto que rodea cada procesión. Es una devoción interior que deriva en un acto de introspección, todo ello junto al enorme valor artístico ceremonial descrito ha hecho que las celebraciones opten, desde 2015, al reconocimiento de la Unesco como patrimonio cultural Inmaterial de la Humanidad.

Una ciudad histórica

Este recorrido por Valladolid es una ventana a la cultura y la historia de España. En el Palacio de los Vivero se casaron los Reyes Católicos. Ha sido cuna de monarcas, como Enrique IV, Felipe IV o Felipe II, que nació en el palacio de Pimentel, uno de los muchos símbolos arquitectónicos y culturales de la ciudad, que desde 1990 alberga una notoria sala de exposiciones. La reina de Francia, Ana de Austria, también nació en Valladolid.

En la ciudad Pucelana, Magallanes firmó la capitulación de la primera vuelta al Mundo. Allí murió Colón y fue enterrado en el desaparecido convento de San Francisco, el lugar que ocupaba da nombre la famosa acera de San Francisco, donde se levanta el teatro Zorrilla, justo frente a la Plaza Mayor. La Plaza Mayor de Valladolid merece una mención especial. Fue ya en el siglo XIII cuando su ubicación actual se convirtió en la plaza del mercado. Pero un grave incendió que tuvo lugar en la ciudad en septiembre de 1561 la destruyó. Inmediatamente se iniciaron las obras de reconstrucción a manos del arquitecto Francisco de Salamanca. En 1562 se inauguró la actual Plaza Mayor, aunque ha sufrido modificaciones desde entonces, como por ejemplo la anexión del ayuntamiento ya en el siglo XX, su maestría y grandeza sirvieron para inspirar las Plazas Mayores de Madrid y Salamanca, de 1580 y 1756 respectivamente.

Cuna del Siglo de Oro

Esta ciudad, bañada por los ríos Pisuerga y Esgueva se convirtió en el centro cultural del Siglo de Oro español. En ella vivieron Quevedo, Calderón, Juan de Juni… En un viaje de Góngora a Valladolid fue cuando surgió su ilustre enemistad con el autor de El Buscón, al que acusaba de imitar su poesía anónimamente. En Valladolid, residió Cervantes, y fue en ese periodo cuando se acabó el Quijote. Su paso por la ciudad sirvió, además, para ambientar momentos de algunas de sus obras, como El coloquio de los perros, o La gitanilla. La casa en la que residió Cervantes en Valladolid es en la actualidad el Museo Casa de Cervantes, situado en la calle del Rastro.

Valladolid también fue la ciudad elegida para que Shakespeare y Cervantes tuvieran un encuentro, ficticio, concebido por el escritor de la Naranja mecánica, Anthony Burguess en su obra Encuentro en Valladolid.

La ciudad conserva buena parte de esta tradición cultural, artística y literaria. Zorrilla o Delibes, por ejemplo, nacieron aquí. El propio Teatro Zorrilla o el Teatro Calderón son 2 de los baluartes culturales de la ciudad, y 2 de las sedes de otro de los grandes eventos anules que alberga, la Semana Internacional de cine, Seminci.

Una ventana a la historia de España, un paseo por el tiempo, por esta ciudad capital, de fama internacional por sus procesiones, pero también por su historia, su propuesta cultural, artística, su gastronomía, sus pinchos, celebra desde hace 14 años el Concurso Nacional de Pinchos y Tapas, una fusión de innovación y tradición, y por supuesto sus vinos. En la provincia de Valladolid se reconocen 5 denominaciones de origen, Toro, Tierra de León, Cigales, Ribera del Duero. Estos últimos eran empleados en la corte en tiempos de los Reyes Católicos.

Todo este influjo cultural que sobrevuela la ciudad y que conforma el casco histórico valió para que fuera la capital de España entre 1601 y 1606.

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