​Visby: paseando por la Edad Media en un bello rincón escandinavo

Nos dirigimos a Suecia, tierra de lagos, de bosques infinitos y de ciudades con historia. Un país de contrastes que ha logrado un equilibrio armonioso entre la naturaleza y la civilización. En este punto del planeta se encuentra nuestra protagonista: la ciudad de Visby, la mayor ciudad en la isla sueca de Gotland. Visby es una de las ciudades medievales mejor conservadas de Escandinavia, lo que le ha valido el título de Patrimonio de la Humanidad otorgado por la UNESCO en 1995. 

Situada en el mar Báltico, en la costa este de Suecia, Visby nos recibe con sus calles adoquinadas y sus casas de colores. En sus inicios, Visby era un importante puerto comercial que floreció en la Edad Media. Hoy en día, esta ciudad, con una población de alrededor de 25.000 habitantes, se ha convertido en un destino turístico de renombre internacional. 

La joya de la corona de Visby es, sin duda, su casco antiguo. Pasear por sus calles empedradas es como dar un paso atrás en el tiempo. Los restos de la muralla medieval que rodea la ciudad se alzan orgullosos, recordándonos la importancia estratégica que Visby tuvo en su momento. La muralla, con sus torres de vigilancia, es un testimonio de la habilidad arquitectónica de la época. 

El casco antiguo también alberga más de doscientos edificios medievales que datan de los siglos XIII al XVII. Entre ellos destaca la catedral de Santa María, un edificio imponente con una historia que también se remonta a la Edad Media. Sus frescos medievales y su bella arquitectura no dejarán indiferente a los amantes de la historia. 

Cuando recorremos las calles empedradas de Visby, nos vamos maravillando ante la presencia de sus alegres casas de colores pastel que parecen sacadas de un cuento de hadas. Los tonos suaves de amarillo, rosa, y blanco crean un contraste hermoso con el azul del cielo y el verde de los jardines. Los rosales trepadores adornan las fachadas y el aroma de las flores se mezcla con la brisa marina. 

Los callejones estrechos nos llevan a plazas encantadoras, donde podemos disfrutar de un café al aire libre y sumergirnos en la vida cotidiana de esta ciudad medieval. El puerto de Visby es otro lugar de gran atractivo, con sus barcos pesqueros y veleros que evocan la tradición marinera de este rincón de Suecia. 

Visby tiene algunas citas interesantes a lo largo del año. Uno de los eventos más destacados es su Semana Medieval, que se celebra cada año en agosto. Durante esta semana, la ciudad se llena de caballeros, doncellas, malabaristas y músicos, creando una atmósfera mágica que te transporta a la Edad Media. 

Otra curiosidad interesante es el fenómeno que se produce durante la primavera. En esa estación del año, las ruinas de antiguos monasterios y edificios se van cubriendo de rosas silvestres, creando un escenario impresionante. 

Sin duda, entre los puntos fuertes de la ciudad se encuentra su gastronomía. Podemos disfrutar de platos tradicionales suecos en los restaurantes locales, como el herring marinado (arenque marinado), el köttbullar (albóndigas suecas) y el gravlax (salmón curado). Además, Visby es famosa por sus helados, el conocido "glass" sueco, que es una delicia refrescante en los días cálidos de verano. Y no olvidamos probar las deliciosas fresas locales, que son conocidas como unas de las mejores de Suecia. 

Antes de despedirnos de esta bonita ciudad de Suecia, queremos detenernos un momento en una curiosidad sobre su nombre. El nombre Visby tiene una interesante historia. Se cree que proviene de los términos "vi", que significa "sacrificio" y "by", que significa "ciudad". Esto se debe a que la ciudad, en la antigüedad, era un centro religioso donde se realizaban rituales y sacrificios. El nombre, por lo tanto, evoca una conexión profunda con la historia y las tradiciones de esta ciudad que nos ha regalado un paseo inolvidable repleto de experiencias únicas.