​Historias y leyendas del castillo medieval de Wartburg

Nuestro destino se encuentra en Alemania, un destacado país europeo conocido por su rica historia, cultura y contribuciones en diversos campos, como la música, la filosofía, la literatura, la ciencia y la tecnología. En el centro de Alemania, en el estado federado de Turingia, está Eisenach, una ciudad situada cercana al río Werra y poseedora de una rica historia y un atractivo patrimonio cultural. Además, es famosa por ser el lugar de nacimiento del gran compositor Johann Sebastian Bach y por albergar a nuestro protagonista en esta aventura: el castillo de Wartburg, una imponente construcción medieval declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. 

Enclavado en lo alto de una colina boscosa en Eisenach, a más de cuatrocientos metros de altura sobre el nivel del mar, este magnífico castillo es uno de los tesoros más emblemáticos del país y una visita obligada para los amantes de la historia, la arquitectura y la cultura. El castillo de Wartburg es un símbolo de la grandeza medieval y ha sido testigo de innumerables eventos históricos. Construido en el siglo XI, la fortaleza ha albergado a nobles, poetas y santos a lo largo de los siglos, y su belleza y aura misteriosa lo convierten en un lugar fascinante para explorar. 

El castillo de Wartburg cuenta con un puente levadizo, una característica arquitectónica típica de los castillos medievales. El puente levadizo permitía controlar el acceso al castillo, levantándose para evitar el paso de intrusos y bajándose para permitir la entrada de visitantes autorizados. Esta estructura defensiva era común en castillos de la época y añade un toque auténtico y cautivador a la experiencia de visitar el castillo de Wartburg. 

Al adentrarnos en las murallas del castillo, nos sumergimos en un ambiente especial y en un mundo de historias y leyendas. Una de las curiosidades más destacadas es la historia del famoso torneo de bardos que tuvo lugar en el castillo en el siglo XII. Según la leyenda, el joven Walther von der Vogelweide, poeta y trovador alemán y una figura importante en la historia cultural de Alemania, ganó el torneo, impresionando a todos con su poesía y canciones. Este evento literario y sus composiciones líricas se convirtieron en una inspiración y tuvieron un impacto significativo en la poesía y la música de la época. 

Seguimos recorriendo el castillo y nos encontramos con la gran sala, una imponente estancia que todavía se usa para conciertos y diferentes eventos. Otra de las salas destacadas es la de los Cantores, también conocida como la sala de la Canción. Este magnífico salón gótico es famoso por su hermosa arquitectura y su acústica perfecta. Según la tradición, aquí es donde los trovadores y músicos se reunían para compartir sus obras y deleitar a la nobleza con sus melodías. Es fácil imaginar el ambiente mágico y bullicioso que debió tener este lugar en el pasado. 

Pero quizás una de las historias más fascinantes del castillo de Wartburg es la de Martín Lutero, teólogo y reformador religioso alemán del siglo XVI, reconocido por su papel en la Reforma Protestante y por la traducción de la Biblia al alemán. 

Durante su exilio, Lutero vivió varios meses oculto en el castillo y allí tradujo el Nuevo Testamento al alemán. La habitación donde se cree que trabajó en la traducción se ha convertido en un lugar de peregrinación para muchos seguidores de la Reforma Protestante. 

Además de su riqueza histórica, el castillo de Wartburg también ofrece vistas panorámicas impresionantes de los alrededores, con paisajes verdes y pintorescos que se extienden hasta donde alcanza la vista. Pasear por los jardines y los patios del castillo es como retroceder en el tiempo y sumergirse en la esencia medieval de la región. 

El castillo de Wartburg nos ha convencido. Sin lugar a dudas, es un tesoro histórico que nos ha transportado a la época medieval de Alemania. Con sus historias, curiosidades y vistas impresionantes, es un lugar que cautiva y que proporciona una experiencia inolvidable.