La ciudad de Castellón prepara los últimos detalles para la celebración de su festividad más importante: Las fiestas de la Magdalena 2023. Declaradas de Interés Turístico Internacional, comenzarán en el amanecer del tercer sábado de Cuaresma y finalizarán el cuarto domingo de este periodo. De tal forma, del 11 al 19 de marzo, las calles de la ciudad se llenarán de actividades caracterizadas por la gran participación de los castellonenses y los visitantes. Unas fiestas abiertas a todos los públicos y que en este 2023 pretenden celebrar en plenitud y sin restricciones uno de los momentos claves en el calendario de la ciudad.
Las Fiestas de la Magdalena son las fiestas principales de la capital de la Plana porque conmemoran su fundación como ciudad. El origen de esta celebración es el traslado de la ciudad desde la colina de la Magdalena hasta la llanura litoral en 1252, gracias al privilegio que les otorgó el rey Jaume I. Por ello, cada año se celebra la llamada “Romería de les Canyes” -declarada Bien de Interés Cultural- en la que miles de castellonenses se levantan al alba y empuñando la caña con su cinta verde en una mano y su "saquet" con el almuerzo en la otra regresan al cerro de la Magdalena y a la ermita que le da nombre, como si de una llamada divina se tratase, a rememorar el testimonio de fidelidad a sus orígenes. Esta costumbre tuvo en sus principios un carácter penitencial que aún se conserva hoy en día.
Al finalizar la romería comienza la denominada "Tornà" de regreso, con el Clero, la Corporación Municipal y Autoridades y la Junta de Fiestas. La "Tornà" realiza prácticamente el mismo recorrido que la romería, efectuando varias paradas oficiales en lugares emblemáticos para cantar los tradicionales y antiguos gozos.
Otra de las particularidades de estas fiestas son las Gaiatas, monumentos de luz exclusivos de Castellón que desfilan en la noche del tercer domingo de Cuaresma y que se instalan en distintas plazas a lo largo de toda la semana de fiestas. Las gaiatas representan los “gaiatos” (cayados), a sus cañas y a sus faroles que, según la tradición, usaron los primeros castellonenses para guiarse en su camino desde la Ermita de la Magdalena hasta la Plana, donde se establecieron finalmente.
Otras actividades
Como fiesta grande que es, el día de la Magdalena tiene una gran víspera, con la celebración de la Cabalgata del Pregón, un desfile en el que participan diferentes colectivos de la ciudad y que anuncia el inicio de las fiestas. Toda una muestra etnológica de tradiciones, folclore y costumbres locales en la que también participan los distintos pueblos de la provincia.
Durante los nueve días de fiesta, la ciudad albergará infinidad de actividades, conciertos, desfiles, actuaciones de grupos de teatro de calle, verbenas y por supuesto, diferentes muestras de la gastronomía local, pero por si algo destacan estas festividades es por las mascletás multicolores que ofrecerán cada día a castellonenses y visitantes los mejores castillos de fuegos artificiales y “correfocs”. Unos espectáculos pirotécnicos entre los que se encuentra su reconocido Concurso de Mascletaes Ciutat de Castelló.
Además, la feria taurina de las Fiestas de la Magdalena de Castellón contará en esta edición con un abono compuesto por cinco corridas de toros –una de ellas mixta-, una novillada picada y dos novilladas sin picadores. Se celebrará del domingo 12 al domingo 19 de marzo y tendrá en el viernes 17 y el sábado 18 sus tardes más destacadas con un mano a mano entre El Juli y José María Manzanares y la corrida con toros de los Hermanos García Jiménez para Sebastián Castella, Roca Rey y Francisco de Manuel.
La ofrenda y el Magdalena Vítol
Estos nueve intensos días culminarán con la celebración de la ofrenda a la patrona de la ciudad, La Mare de Déu del Lledó, y el tradicional Magdalena Vítol.
El llamado Magdalena Vítol es el último gran acto oficial de las fiestas de la Magdalena de Castellón y se celebra en la Plaza Mayor de la capital de la Plana en la medianoche del último domingo de fiestas. Se trata de un espectáculo que congrega a miles de personas donde las reinas de las fiestas gritan desde el balcón del ayuntamiento: “¡Magdalena!”, y el público responde desde abajo: “¡Vítol!”, una palabra en valenciano arcaico que significa “¡Viva!”. Con este acto se dan por finalizadas las fiestas de ese año y comienzan los preparativos de las fiestas del año siguiente.
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