Nos acercamos a Brasil, un país en el que es imposible no contagiarse del entusiasmo de su ambiente. Brasil está repleto de lugares interesantes, comenzando por la Ciudad Maravillosa, que es como se conoce popularmente a Río de Janeiro, una urbe cosmopolita repleta de grandes zonas de selva tropical en pleno centro urbano, conviviendo hábilmente con enormes avenidas, edificios y cientos de automóviles.
El lugar que buscamos se encuentra bastante alejado de este popular destino. Recordemos que el país que visitamos es de grandes dimensiones, y entre Río y Maranhão, el estado al que nos dirigimos, median casi 3.000 kilómetros de distancia.
Maranhão –Marañón en español- es un estado situado en el noreste del país que presenta una rica diversidad de especies en fauna y flora y unos escenarios naturales realmente fascinantes. Uno de esos territorios es nuestro protagonista. Visitamos el Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses, un área protegida con una belleza tan evidente que atrae a miles de turistas cada año, aunque, por el momento y afortunadamente, sigue sin ser un destino masificado.
El paisaje del parque está alfombrado de campos de dunas y lagunas que se convierten en auténticas piscinas naturales de agua dulce cuando llega la temporada de lluvia, especialmente entre enero y mayo, quedando los lagos totalmente llenos de junio a septiembre. Este conjunto de fina arena blanca y aguas tranquilas y limpias forma un escenario natural único en el planeta. Ocupa alrededor de mil quinientos kilómetros cuadrados que pueden recorrerse disfrutando del entorno y dándose algún que otro chapuzón.
El nombre de Lençóis Maranhenses significa ‘Lino de Marañón’, y, al parecer, hace referencia a la similitud entre las formas onduladas de las dunas y los suaves pliegues que se forman en una sábana de lino. En las cientos de pequeñas playas que se forman en el parque habitan tortugas, cangrejos y aves migratorias que están de paso y se alimentan en el lugar.
El Parque Nacional de los Lençóis Maranhenses se encuentra cerca de la ciudad de San Luis de Maranhão, una bonita población que es capital del estado y que invita a una visita para descubrir sus encantos. Su casco antiguo, repleto de casas coloniales y edificios históricos, bien merece un paseo. San Luis cuenta con la declaración de Patrimonio Cultural de la Humanidad de la UNESCO.
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