Nos acercamos al norte de Italia, un país increíble repleto de arte, naturaleza y ciudades y pueblos fascinantes. Nuestro destino se encuentra a tan solo una hora por carretera de Verona, la romántica ciudad de la región del Véneto, escenario de una de las obras más destacadas del gran William Shakespeare: Romeo y Julieta.
Verona está bañada por el río Adigio y tiene como vecino cercano al bello lago de Garda, lugar que nos acerca hasta el destino que hemos venido a buscar: Torbole, una encantadora y pintoresca población situada en medio de un paisaje espectacular. Su ubicación a los pies del monte Baldo y a la orilla del lago es uno de sus principales atractivos.
Torbole conserva su imagen original de pueblo de pescadores. Su puerto con pequeñas embarcaciones y casas de colores sigue siendo una de las mayores atracciones de la localidad. El bello entorno es otro de los puntos fuertes de Torbole, hasta tal punto que numerosos artistas y poetas encontraron inspiración en este escenario casi pictórico.
La Casa del Dazio es uno de los puntos de interés de la población. Es una pequeña casa junto al lago que destaca por la presencia permanente de alegres flores en sus balcones. En realidad es una antigua aduana que funcionaba cuando Torbole era un lugar fronterizo y los aduaneros austriacos realizaban el control de las mercancías que llegaban al puerto.
Si alzamos la mirada, alcanzaremos a ver Nago, otro pequeño pueblo que se sitúa en lo alto de la montaña, sobre Torbole, y supone un aliciente más para visitar este punto de Italia. Aquí, a unos doscientos metros de altura, se encuentran las ruinas del castillo Penede, lo que supone una interesante excursión. El castillo, o lo que queda de él, se encuentra rodeado de un bonito parque y las vistas desde lo alto resultan espectaculares, alcanzándose a ver Torbole, los viñedos y la vegetación que lo envuelve y el lago de Garda. Además, en el paseo de una localidad a otra vamos a encontrar antiguos pozos de excavación glacial que se remontan a la era cuaternaria.
Torbole disfruta de un ambiente muy animado gracias a estar situado a la orilla del lago, ya que se ha convertido en un punto donde la práctica de deportes acuáticos es habitual y sirve como reclamo para atraer a visitantes de diferentes lugares. Las excursiones en barco y la vela, por ejemplo, son un clásico en la población. Además, es uno de los destinos más buscados por los amantes del surf. Pero también son muy frecuentes otros deportes, como el senderismo, el ciclismo o la escalada.
No podemos despedirnos de Torbole sin degustar su producto típico más destacado: el brócoli. Esta verdura encuentra en este territorio todo aquello que necesita para garantizar una calidad excepcional. Son muchas las recetas de la zona que lo incluyen y se elabora de mil maneras. Tal es la popularidad del brócoli en Torbole que todos los años, en el puerto de la población, se celebra una fiesta en su honor en la que todo el mundo puede disfrutarlo en variados platos que ofrecen los locales del lugar.
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