Loket y su castillo medieval

Nos acercamos a la zona más occidental de la República Checa. Nuestro destino se encuentra a unas dos horas de trayecto por carretera de Praga y muy cerca –solo a quince kilómetros- de Karlovy Vary, una de las urbes más bellas del país, una ciudad balneario, conocida por sus excelentes aguas termales y fundada en el siglo XIV por Carlos IV de Luxemburgo, el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, de quien recibe su nombre. Karlovy Vary es elegante y disfruta de un encanto arquitectónico que enamora. Su aspecto general es impecable, lleno de encanto. 

Junto a esta bonita ciudad se encuentra Loket, una pequeña población medieval de cerca de tres mil habitantes que está rodeada literalmente por las aguas del río Ohre. Un antiguo puente sobre este río es la vía principal de acceso al municipio. 

El centro histórico la población es un lugar que invita al paseo. Al recorrerlo se descubren sus encantadoras calles con coloridas casas adornadas con flores y su plaza central, en torno a la que se encuentran una serie de antiguas casas burguesas. Curiosamente, la plaza de Loket fue el escenario en el que se rodaron algunas de las escenas de la película de James Bond ‘Casino Royale’. 

Se cuenta que Goethe, el conocido poeta y novelista alemán, solía frecuentar la zona de los balnearios de esta parte de la República Checa, especialmente los de Karlovy Vary. Dada la cercanía de esta ciudad con el pueblo de Loket, el poeta realizó más de una escapada a la población. Una de ellas, en agosto de 1823, coincidió con el cumpleaños de Goethe, jornada en la que recibió el aplauso y la admiración de los habitantes de Loket. 

Pero el gran protagonista de Loket es su castillo medieval. Esta construcción del siglo XIII se alza en lo alto de una colina dominando todo el entorno. Es una de las fortalezas más antiguas de la República Checa. En su interior se pueden visitar sus patios monumentales, las mazmorras, la torre y diferentes estancias con exposiciones, entre las que pueden verse una gran variedad de porcelanas.  

En el castillo de Loket también puede visitarse la antigua farmacia de la localidad y la cárcel con su temible sala de tortura. Además, curiosamente, el castillo conserva un meteorito que, al parecer, cayó en el patio de la fortaleza en el siglo XV. 

Sin duda, la pequeña población de Loket está repleta de interés. Incluso sus alrededores pueden presumir de una increíble naturaleza que invita a realizar actividades al aire libre, como el senderismo o la práctica de deportes acuáticos en el río Orhe.