Después del bullicio, la fiesta, las luces, los brindis y el ritmo frenético de las celebraciones con motivo de la entrada del nuevo año, no existe nada más reconfortante que comenzar esta primera semana de 2022 en un lugar relajado, repleto de encanto rural y escondido en un entorno natural fascinante.
En estas primeras horas del recién estrenado año, nuestros pasos nos llevan hasta una pequeña localidad de Bélgica, un remanso de paz envuelto por un paisaje de ensueño. Nos da la bienvenida al lugar un silencio reparador, tan solo interrumpido por los hermosos sonidos de la naturaleza. Estamos en Shadeck, un pequeño pueblo perteneciente al municipio de Attert, una bella comuna en la región de Valonia, en la provincia de Luxemburgo.
Los poco más de cien habitantes de Shadeck son gentes privilegiadas que comienzan el día con amaneceres espectaculares y lo despiden con puestas de sol que emocionan. Aquí la vida pasa lenta, y el centenar de vecinos de la población disfruta de todas las buenas sensaciones que proporciona sentirse en medio de un hermoso territorio de gran riqueza medioambiental: el Parque Natural del Valle de Attert.
El parque está situado entre Arlon y Martelange, en la parte sur de la provincia de Luxemburgo. Ocupa un espacio de transición entre el bosque de Anlier en las Ardenas y las conocidas colinas de la región de Lorena. Se creó en el año 1994 para preservar y realzar la identidad de las áreas rurales habitadas que acoge y para proteger sus valores paisajísticos y su numerosa y diversa fauna y flora.
El valle de Attert es un auténtico oasis natural que invita a practicar turismo ecológico, a fundirse con la naturaleza y a integrarse en un ambiente que ha sabido conservar su esencia. Existen numerosos senderos señalizados que invitan al paseo para conocer los diferentes paisajes del valle y los diecisiete pequeños pueblos y caseríos que se encuentran en este territorio. También es una buena idea realizar estos recorridos sobre una bicicleta.
El Attert, el río que da nombre al parque natural, nace en la población de Nobressart, una preciosa localidad incluida en la Asociación de los Pueblos más Hermosos de Valonia. Los numerosos afluentes de este río son el origen de una importante red ecológica formada por ríos, humedales, setos y árboles que bordean las riberas y arroyos.
En el recuerdo
Desde 1886 hasta la década de los años 50 del siglo pasado, Shadeck contó con un instituto de educación media: el Instituto Molitor, un importante centro educativo que incluía la escuela de secundaria gratuita, la escuela de idioma francés, la agrícola y la escuela mecánico-eléctrica, cuatro importantes áreas que fueron de gran utilidad en esta zona rural.
La presencia de este instituto permitió a muchos estudiantes de los pueblos vecinos continuar sus estudios después de la escuela primaria, aunque la mayoría de ellos solo lo hizo durante un año, para después incorporarse al mundo del trabajo. Las dificultosas comunicaciones de aquel momento impidieron que la mayoría de los alumnos llegaran hasta la localidad de Arlon para continuar con su educación.
El Instituto Molitor cerró sus puertas tras setenta años de funcionamiento. Aún hoy en día sigue recordándose como uno de los lugares emblemáticos de Shadeck.
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*Imágenes: Léa Heynen
*Con la colaboración de Nathalie Druart, responsable de Comunicación del Parque Natural del Valle de Attert
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