Paseamos por un territorio en el que resuenan cientos de leyendas, tierras alfombradas de un verde intenso y situadas a orillas del río Shannon, en el condado de Offaly. Seguro que estas pistas son suficientes para adivinar que nos encontramos en Irlanda.
Nuestro destino es Clonmacnoise, un conjunto monástico que se remonta al siglo VI d.C. y que fue fundado por San Ciarán quien, tras una visión, dedicó varios años de su vida a localizar un buen emplazamiento para levantar una abadía. Los terrenos elegidos fueron los que ahora recorremos y que se encuentran en pleno centro de Irlanda, un área poco masificada y muy tranquila que nos asegura una aventura plácida y repleta de historia y cultura.
Clonmacnoise está a algo más de 130 kilómetros de Dublín, aunque a este paraje inspirador también puede llegarse navegando por el río desde la cercana población de Athlone. Tanto si nos decantamos por un transporte como por otro, es realmente emocionante descubrir las antiguas ruinas que reúne este lugar que en su día fue un importante centro religioso.
Sus primeras construcciones fueron rústicos edificios de madera que con el tiempo fueron sustituidos, allá por el siglo XI, por los de piedra que han dejado su huella en Clonmacnoise. Cerca de 2.000 personas llegaron a vivir en este complejo religioso, especialmente monjes, artesanos y trabajadores junto a sus familias. Era un lugar lleno de actividad que llegó a convertirse en uno de los centros religiosos y culturales más importantes de Irlanda.
El conjunto cuenta con dos torres y los restos de varias iglesias. La catedral es la que posee mayores dimensiones, mientras que el templo de San Ciarán es la construcción más pequeña. Las cruces celtas son otro de los grandes atractivos de este lugar. Se conservan en un pequeño museo que las protege de las inclemencias del tiempo. Destacan la Cruz del Sur y la del Norte, además de la Cruz de las Escrituras, que destaca por ser la más alta con sus cerca de 4 metros de altura.
Estamos en uno de los centros patrimoniales más importantes del país de los tréboles, un lugar que también acoge los restos de antiguos monarcas que reinaron en este territorio. Sin duda, Clonmacnoise es uno de los destinos más atractivos de Offaly, pero no es el único aliciente que presenta este condado irlandés. Aquí también vamos a encontrar una naturaleza espectacular, bellísimos paisajes, castillos, abadías… Es un lugar ideal para practicar algunos deportes al aire libre o sencillamente disfrutar de un paseo tranquilo en medio del ambiente especial y de la paz de este trocito de Irlanda.
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