La preocupación por el cambio climático ha hecho que el mercado de los viajes tenga que redefinirse ante la demanda de los españoles por opciones menos contaminantes, como las escapadas en coche, que cada vez ganan más terreno frente a los de larga distancia. El perfil de los viajeros ha tenido una especial transformación en los últimos años y apuesta ahora por el turismo sostenible en todos los aspectos, comenzando por la movilización. Según datos de Weekendesk un viaje de dos horas en coche tiene una emisión de apenas 0,04 toneladas de CO2, mientras que en avión la huella de carbono es hasta doce veces mayor, alcanzando 0,49 toneladas.
El estudio “Hábitos y tendencias del turismo de fin de semana”, realizado por Weekendesk.es, demuestra que el “flygskam” (vergüenza a volar) se está imponiendo, ya que el 45% de los españoles estarían dispuestos a reservar viajes cortos para no coger el avión. Por eso ahora la tendencia es viajar a destinos cerca de casa, con más frecuencia, distribuyendo los días libres durante todo el año en puentes y fines de semana.
“Los españoles están cada vez más implicados en la lucha contra el cambio climático, algo que llevan a todos los planos de su cotidianidad, sin excluir de ninguna manera algo que disfrutan y forma parte esencial de su vida: los viajes. Los turistas son más conscientes del impacto que tiene esta actividad en el medioambiente, por eso son más proclives a recurrir otras alternativas más amigables con el ecosistema y que les conecten con su entorno, como las escapadas a enclaves naturales a poca distancia donde puedan desconectar”, explica Brigitte Hidalgo, directora adjunta de Weekendesk.
Teruel y su propuesta de lujo ganan terreno
Huir del llamado “overtourism” y optar más por lugares tranquilos es una tendencia que se mantiene en fuerte crecimiento, especialmente en el mercado de las escapadas. Según el estudio de Weekendesk, el 63% de los viajeros escoge lugares no masificados, también conocidos como “microcations” para descansar los fines de semana. Esto ha permitido que destinos poco descubiertos, pero con un enorme potencial turístico, estén ganando terreno frente a los tradicionales que, hasta ahora, se llevaban una buena parte de la cuota de visitantes a nivel nacional.
Teruel despunta entre las preferencias de los españoles que buscan escaparse un fin de semana, registrando un incremento de 23% en las ventas en apenas un año. La tranquilidad de sus entornos le han convertido en uno de los paraísos más buscados por los españoles para refugiarse y vivir experiencias de bienestar en conexión con la naturaleza. Los planes vinculados al lujo han tenido un especial impulso en el último año, con un incremento de 134% de las ventas de estos paquetes, convirtiéndole en un enclave de esta categoría.
Andalucía, Cataluña y la Comunidad Valenciana con sus encantadores pueblos de gran diversidad lideran las ventas de planes para disfrutar los fines de semana, según Weekendesk.es. Los planes wellness combinados con experiencias gastronómicas de platos típicos (como cenas románticas y catas) son los más demandados en estas regiones.
Otras regiones como Castilla y León, Asturias, Galicia y País Vasco también concentran una buena parte de las reservas en las categorías de planes gastronómicos y de bienestar, gracias a su excelente oferta de restaurantes y de centros wellness, como los spas y los balnearios.
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