Nuestros pasos nos llevan hasta el Sultanato de Omán, en la península arábiga. Queremos disfrutar de imágenes que nos transporten y nos hagan soñar con las historias de Las mil y una noches y las aventuras de Simbad. Omán se encuentra rodeado de hermosas montañas que se acercan al mar y los omaníes son gentes orgullosas de su pueblo que acogen con amabilidad al visitante.
Este país combina a la perfección su esencia más tradicional y genuina con nuevos aires de modernidad. Estamos en un lugar que goza de una intensa historia, una gran tradición cultural y de hermosos paisajes.
Nuestro destino está en la capital, Mascate, una ciudad de tonalidades blancas que nos espera a orillas del golfo de Omán. Su historia se remonta al siglo VI a.C. y la presencia de su activo puerto ha proporcionado gran notoriedad a este punto del planeta desde tiempos antiguos.
Ahora vamos a descubrir algunas razones que nos confirman que Mascate bien merece una visita.
Gran Mezquita del sultán Qaboos
Estamos en la mayor mezquita y más importante del Sultanato de Omán, un increíble edificio abierto a las visitas de los viajeros. Es relativamente nuevo. Nació en 2001 por iniciativa del sultán Qaboos, quien, después de tres décadas en el poder, pensó que debía crear alguna construcción monumental en honor a todos esos años de reinado que también sirviera como reconocimiento a los habitantes de Omán.
Para su construcción se invirtieron cerca de 300.000 toneladas de arenisca y en su interior tampoco se escatimó con los materiales y decoraciones. Destaca la presencia de suelos de mármol, preciosos mosaicos y colosales ornamentos, como la gran alfombra persa de más de 70 metros. El exterior merece ser visto tanto por el día como por la noche, ya que cuando oscurece el edificio proyecta una preciosa imagen iluminada.
Casa de la Ópera
Este espectacular edificio acoge algunos de los mayores eventos culturales de Omán. Está considerado como uno de los teatros de la ópera más bellos y avanzados del mundo. Combina la tradición árabe con líneas más vanguardistas, además de utilizar importante tecnología capaz de aumentar o disminuir la capacidad de la sala en cuestión de segundos.
Este centro de artes escénicas acoge eventos y espectáculos de primera magnitud. Como ejemplo, el próximo mes de febrero se anuncia la representación de La Traviata, de Giuseppe Verdi, con la participación protagonista del gran Plácido Domingo.
Museo Nacional de Omán
Un excelente espacio museístico en el que descubrir al detalle la cultura omaní. Se encuentra en un bello edificio, muy bien distribuido y organizado. Podemos disfrutar de diferentes maquetas, muestras interactivas y filmaciones. El museo ofrece paseos por variadas temáticas, como la tradición marinera del país, sus principales sitios históricos, cultura, tradiciones… Cientos de años de historia muy bien presentados.
Palacio de Al Alam
Le ponemos la guinda a este pequeño paseo por algunos lugares clave de Mascate visitando la residencia oficial del sultán Qaboos. Construido en la década de los setenta del siglo pasado, el palacio nos recibe con una fachada en la que destacan sus pilares dorados y azules.
El palacio de la bandera se encuentra muy cerca del puerto de la ciudad y ofrece una imagen atípica, si nos basamos en la norma a la que nos tienen acostumbrados otros palacios de aspecto mucho más pomposo. Aunque no podemos visitar su interior, el edificio está rodeado de bellos y cuidados jardines que vale la pena conocer.
Otras visitas imprescindibles de la capital de Omán son el pintoresco zoco, los antiguos fuertes construidos por los portugueses con el fin de controlar la entrada hasta el puerto de Mascate y la zona más antigua de la ciudad. Mascate es un destino que nos inunda de aromas de esencias y especias y nos envuelve con el sonido característico de la llamada a la oración. Un lugar tranquilo que nos atrapa con su magia y su autenticidad.
Revista Viajes y Lugares
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