Comienza la época de cartas a Papá Noel y a los Reyes Magos y una de las peticiones más comunes de los niños son las mascotas. Como dijo Roger Caras: “las mascotas no son nuestra vida completa, pero definitivamente completan nuestra vida”, y es que un perrito proporciona alegría a cualquier familia, pero también obligaciones que no se deben olvidar.
Uno de los momentos que pueden parecer más complicados en cuanto a logística es la planificación de viajes vacacionales, incluso cuando se trata de escapadas de puentes o fines de semana. Sin embargo siguiendo unas sencillas pautas se puede planificar un viaje de ensueño en la compañía de familia, amigos y los queridos peludos. El hotel La Bobadilla, un hotel pet-friendly, ofrece una lista de recomendaciones para concienciar de que un viaje con las mascotas puede ser muy sencillo y agradable para todos.
Antes de viajar
Antes de emprender cualquier viaje en compañía de animales, es muy importante informarse de los requerimientos sanitarios del destino para tener las vacunas del peludo al día. Otra cosa que hay que tener muy presente es la seguridad de la mascota durante el viaje, ya que muchos animales se ponen nerviosos e intentan escaparse. Por ello, es muy recomendable identificar a la mascota con un microchip y llevarle siempre puesto un collar con placa.
Elegir bien el medio de transporte
Aunque va a depender en gran medida de la distancia a recorrer, también se debe tomar en cuenta la personalidad de la mascota, su edad, su estado de salud y los requerimientos de la compañía de transporte. Por ejemplo, algunas compañías de trenes y compañías aéreas permiten que las mascotas pequeñas viajen junto a sus dueños en trasportines, pero otras solo permiten animales en el área de equipaje. Si la mascota es nerviosa o se marea, se puede consultar con un veterinario sobre la administración de medicamentos calmantes o para el mareo, de forma que la experiencia sea lo más agradable posible para el perrito y para su dueño.
Alojamientos pet-friendly
Cada vez son más las familias que deciden incluir una mascota en su vida y encontrar alojamientos vacacionales que las acepten se convierte en una auténtica maratón.
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