Viajamos a una isla muy cercana a la India, un lugar del planeta calificado por muchos como un auténtico edén. Es un territorio con una rica cultura, una espiritualidad milenaria y donde la naturaleza se expresa con total libertad.
Nos acercamos a Sri Lanka, la antigua Ceilán, una tierra de gentes alegres y acogedoras, un lugar de gran belleza y diversidad paisajística con impresionantes playas, bosques, montañas y vetustas ciudades, muchas de ellas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. No nos olvidamos de su magnífico té de reconocida fama en todo el mundo.
Conocida como la perla del Índico, Sri Lanka siempre ha ejercido una gran fascinación sobre aquellos que la han visitado. Grandes viajeros de la historia como Marco Polo han dado fe de su belleza.
Este país asiático se encuentra al sur de la India, sin embargo mantiene con ésta grandes diferencias, tanto sociales como religiosas. En Sri Lanka la religión mayoritaria es la budista, aunque también nos encontramos con cerca de un 15% de población hinduista, tan solo un 8% musulmana y un porcentaje similar de población cristiana. Cuenta con dos idiomas oficiales, el cingalés y el tamil, aunque el inglés también suele ser muy utilizado. Recordemos que esta isla se independizó del Reino Unido en 1948.
Después de saborear un buen plato de arroz con curry estamos listos para descubrir algunas de las ciudades más destacadas de este increíble país.
Colombo
Estamos en la ciudad más poblada del Sri Lanka. Es su centro financiero y comercial, de hecho la gran mayoría de las empresas tiene aquí su sede, por lo que los rascacielos y grandes edificios de oficinas son el paisaje habitual, pero no el único. También encontramos muestras de arquitectura colonial, animados mercadillos callejeros y las siempre presentes estatuas de Buda en muchos rincones de la ciudad.
Anuradhapura
Esta población impregnada de budismo es una de las más antiguas de Sri Lanka y está considerada la ciudad más sagrada de la isla. Por todas partes nos encontramos con espectaculares estupas, construcciones circulares y abovedadas típicas de la arquitectura más antigua del país y destinadas al culto budista. Una de las más impresionantes alcanza a medir más de 100 metros de altura y data del siglo II a.C. Es uno de los grandes puntos de peregrinación del país.
Anuradhapura se encuentra en la zona norte de Sri Lanka, a cerca de 200 kilómetros de Colombo. En esta milenaria ciudad también podemos contemplar el Bodhi, un árbol de grandes dimensiones y sagrado para el budismo. Se cree que bajo un árbol de este tipo estaba sentado Buda cuando alcanzó la iluminación.
Kandy
Nos adentramos ahora en una bonita ciudad de paseo agradable, gran actividad cultural y un lago que embellece su centro histórico. Sin embargo, su gran foco de atención es el templo del Diente de Buda.
Como cabe imaginar por su nombre, esta imponente construcción guarda en su interior un diente de Gautama Buda. Esta pieza dental es una de las grandes y sagradas reliquias del budismo y sobre ella se cuenta una leyenda que, en resumen, viene a relatar cómo tras la muerte de Buda y su posterior incineración fue localizado el citado diente tras haber quedado a salvo de las llamas. Desde entonces se cree que quien lo posea logrará gobernar estas tierras.
Esta reliquia es protagonista de una gran fiesta local en honor a Buda. La animada celebración cuenta con elefantes, música y fuego y tiene lugar todos años coincidiendo con los meses de julio y agosto.
Polonnaruwa
Estamos en otro de los puntos del país en los que la historia nos sale a cada paso. De hecho, uno de sus mayores atractivos son las ruinas y restos arqueológicos de la ciudad antigua. Esta urbe fue la sede de los reyes cingaleses durante más de dos siglos.
La ciudad antigua de Polonnaruwa forma parte de la Lista Mundial del Patrimonio UNESCO y contiene una interesante serie de monumentos brahmánicos e impresionantes restos monumentales de la ciudad jardín creada en el siglo XII por uno de los grandes monarcas que tuvo este país: Parakrama Bahu. Durante su reinado consiguió mantener la paz en todo el territorio, momento plácido que sirvió para que se expandiera un arte y una arquitectura muy cuidados.
Sigiriya
Aunque no se trata de una ciudad, no nos resistimos a visitar este magnífico conjunto arqueológico de Sri Lanka, situado en el distrito de Matale. En este impresionante lugar nos encontramos las ruinas de diferentes edificaciones, entre las que destacan un monasterio y un palacio. Lo más espectacular es que se encuentran sobre una enorme y elevadísima roca conocida como Roca del León que cuenta con la declaración de Patrimonio de la Humanidad.
Hasta la gran roca y el yacimiento arqueológico que contiene se accede subiendo unas escaleras instaladas al efecto. Pero antes de disponernos a subirlas, habremos de atravesar unos fascinantes jardines a los que no les falta un detalle: árboles, flores, estanques… Cabe señalar que este lugar cuenta con unas residentes habituales: las abejas. Interesa andarse con cuidado si no queremos que salgan a saludarnos.
Revista Viajes y Lugares
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