Préstamos personales para vacacionar en verano

El verano es un tiempo ideal para pasar tiempo con la familia, amigos y hacer cientos de actividades divertidas. Por esta misma razón el verano o cualquier temporada de festividades o vacaciones implica un aumento en los gastos de la familia, lo que podría ser no tan emocionante. Un ejemplo de ello es que solo en Estados Unidos y durante el 2021, el 36% de la población se endeudó a causa de sus vacaciones de navidad. 

Los créditos personales son una alternativa para evitar el sacrificio de los ahorros para solo disfrutar algunos días de entretenimiento. Si bien al recibir un crédito al final terminas pagando más de lo que inicialmente gastaste, los pagos mensuales y con cómodas tasas de interés te ayudarán a cuidar tu economía y resultará mucho más amigable con tu bolsillo. 

¿Qué son los préstamos personales? 

Seguro habrás escuchado que los créditos siempre son difíciles de obtener y qué debes reunir muchos requisitos para conseguir que te aprueben uno, pero con los préstamos personales es distinto. En primer lugar, estos préstamos están dirigidos a personas naturales que necesiten ayuda para financiar alguna actividad.  

Esta no tiene que estar relacionada a algo comercial sino que como su nombre lo indica, puede ser usado para motivos personales como pagar una matrícula estudiantil, saldar alguna deuda, o por supuesto, para viajar y vacacionar. 

¿Cómo solicitarlo? 

Los requisitos para solicitar un préstamo personal pueden variar dependiendo del banco, pero en general todos te imponen la condición de que debes haber pagado la totalidad de ese dinero en un mediano plazo, incluyendo los intereses que se hayan especificado. Ya queda de tu parte decidir si realizarás el pago completo o si escoges saldar tu deuda en varias cuotas o pagos mensuales. 

El banco se tomará el tiempo de evaluar tu solicitud y determinar si eres un candidato apto para pagar el préstamo que estás pidiendo. Lo que tomarán en cuenta para llegar a esa conclusión es tu historial de crédito, así que si gozas de una buena reputación ante tu banco, muy probablemente recibirás el monto que necesitas. 

Ten en cuenta que debes solicitar una cantidad que verdaderamente puedas pagar en el plazo estipulado. No conviertas tus vacaciones en lo que más tarde será una mortificación para tus finanzas.  

Ventajas de los préstamos personales

● Obtener un préstamo personal te hará sentir más holgado en cuanto a los gastos de tus vacaciones de verano. Si realizas un plan de pago, saldar tu deuda tampoco será una gran preocupación.

● Este es un tipo de préstamo que no exige garantías adicionales, a diferencia de cómo suelen funcionar otros tipos de créditos como los hipotecarios o automotrices.

● Es muy probable que para poder recibir un préstamo personal no necesites presentar un aval al banco, aunque por supuesto esto puede cambiar dependiendo de la entidad financiera.

● A diferencia de los créditos hipotecarios o para negocios, el proceso de los préstamos personales suele ser mucho más rápido y descomplicado. Incluso podrás encontrar bancos que permitan realizar la solicitud del préstamo de forma completamente online.

Considera esto antes de solicitar uno

● Define muy bien cuál será el uso que le darás a tu préstamo. Así podrás administrarlo de forma más responsable en lugar de gastarlo en cosas que no estaban planificadas.

● Sé honesto contigo mismo y evalúa si verdaderamente es algo que podrás pagar en el tiempo estipulado. No todo se trata de recibir dinero y gastarlo. También debes tener como prioridad devolverle al banco el dinero prestado, incluyendo los intereses. De otra forma retrasarte en los pagos afectaría tu historial crediticio.

● Infórmate sobre las tasas de interés. El banco te dirá cuál será la tasa que debes pagar pero también es probable que puedas negociar este punto y llegar a un acuerdo o monto que se adecúe a tus posibilidades.

Conclusión 

Al recibir un préstamo personal podrás disfrutar de tus vacaciones de verano con toda tranquilidad. No tendrás que limitarte, quedarte en casa o sentir culpabilidad por gastar tu dinero. Gracias a este tipo de financiamiento, podrás costear algún viaje y pagarlo más tarde en cómodas cuotas o como sea que lo hayas planificado con tu banco. Disfruta tus vacaciones y mantén tus finanzas saludables.